Muchos creemos que es difícil trabajar con niños, por el hecho de que además de ser muy activos y tener que mantenerlos en un constante cambio de actividad que sea conforme para todos resulta complejo de muchas maneras.
Ser la profesora de educación física me ha enseñado a tener una gran imaginación con respecto a actividades extra curriculares que mis niños pueden desarrollar, el que ellos sean discapacitados lo vuelve un reto para mi mas no para ellos porque con el pasar de los días cada vez mas entiendo que son capaces de todo.
Manejar a niños no es fácil, algunos te escuchan otros simplemente corren por todos lados pretendiendo que no existes, pero con un poco de paciencia, trato y buenas energías todo es posible.
Trabajar con 160 niños en momentos diferentes a veces con ayuda a veces sola me es muy grato, a veces se vuelve un desafío pues ellos cuentan con distintas discapacidades, desde parálisis cerebral hasta problemas auditivos. Es por eso que con el pasar del tiempo he aprendido como hablar en señas lo cual me ayuda mucho al momento de entenderlos y de comunicarnos, es simplemente maravilloso.
Otra de las experiencias mas increíbles que he vivido aquí es presenciar la dedicación de las madres con sus hijos, están todo el día ahí, ayudando con otros pequeños, enseñando y compartiendo con ellos es único.
Cuando somos pequeños todos necesitamos de nuestros padres, ¿Como soportar unas pequeñas lagrimas cuando llega el momento de decir adiós por las mañanas? Pues con mucho cariño y paciencia lo mejor es tomarlo entre tus brazos, secar sus lagrimas hacer que sienta la seguridad que encuentra en sus padres, es hermoso y mejor aun si simplemente después de unos cuantos minutos te das cuenta que tienes un pequeño angelito durmiendo sobre tu hombro. Simplemente perfecto.
Esta y muchas experiencias, porque cada día junto a ellos es algo mas que contar, una historia mas, un día mas de paz, una experiencia mas.
Besos desde India...
Ser la profesora de educación física me ha enseñado a tener una gran imaginación con respecto a actividades extra curriculares que mis niños pueden desarrollar, el que ellos sean discapacitados lo vuelve un reto para mi mas no para ellos porque con el pasar de los días cada vez mas entiendo que son capaces de todo.
Manejar a niños no es fácil, algunos te escuchan otros simplemente corren por todos lados pretendiendo que no existes, pero con un poco de paciencia, trato y buenas energías todo es posible.
Trabajar con 160 niños en momentos diferentes a veces con ayuda a veces sola me es muy grato, a veces se vuelve un desafío pues ellos cuentan con distintas discapacidades, desde parálisis cerebral hasta problemas auditivos. Es por eso que con el pasar del tiempo he aprendido como hablar en señas lo cual me ayuda mucho al momento de entenderlos y de comunicarnos, es simplemente maravilloso.
Otra de las experiencias mas increíbles que he vivido aquí es presenciar la dedicación de las madres con sus hijos, están todo el día ahí, ayudando con otros pequeños, enseñando y compartiendo con ellos es único.
Cuando somos pequeños todos necesitamos de nuestros padres, ¿Como soportar unas pequeñas lagrimas cuando llega el momento de decir adiós por las mañanas? Pues con mucho cariño y paciencia lo mejor es tomarlo entre tus brazos, secar sus lagrimas hacer que sienta la seguridad que encuentra en sus padres, es hermoso y mejor aun si simplemente después de unos cuantos minutos te das cuenta que tienes un pequeño angelito durmiendo sobre tu hombro. Simplemente perfecto.
Esta y muchas experiencias, porque cada día junto a ellos es algo mas que contar, una historia mas, un día mas de paz, una experiencia mas.
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